La
danza árabe proviene de una larga tradición de oriente. Existen muchos mitos
acerca de su origen y del propósito de las mismas, pero en este caso nos
interesa saber como llegó a México y como es que lo conocemos ahora y todo esto
sucedió en 1930.
1930
En México ya habían muchos diferentes tipos de danza y fue en este momento en donde se empezó a enseñar esta danza gracias a que llegaron bailarinas famosas provenientes de Estados Unidos que ya tenían experiencia en esta danza, entre ellas encontramos a Miss Lettie Carroll, Armén Ohanian y Xenia Zarina. Pero ya a profundidad se empezaron a dar las primeras clases en el International Dance Center impartidas por la profesora Marla de la Vega, quien formó formó a la primera generación de maestras de danza del vientre, como Samira y Patricia Fuentes.
En México ya habían muchos diferentes tipos de danza y fue en este momento en donde se empezó a enseñar esta danza gracias a que llegaron bailarinas famosas provenientes de Estados Unidos que ya tenían experiencia en esta danza, entre ellas encontramos a Miss Lettie Carroll, Armén Ohanian y Xenia Zarina. Pero ya a profundidad se empezaron a dar las primeras clases en el International Dance Center impartidas por la profesora Marla de la Vega, quien formó formó a la primera generación de maestras de danza del vientre, como Samira y Patricia Fuentes.
1980
Marla nunca había estado en Medio Oriente, sin embargo se documentaba de libros y había tomado clases en Estados Unidos por lo que aparte de compartir sus conocimientos aprendidos en dicho país, también contaba con videos Beta para complementar sus clases. Fue así como poco a poco se fue popularizando esta danza y para este año ya se impartían clases en el centro Libanés, aparte de haberse fundado un restaurante libanés en Polanco, Adonis, en donde se daban exhibiciones de danza árabe. Tanto fue el éxito de este restaurante que bailarinas reconocidas a nivel mundial de esta danza, se presentaban en este lugar y también esta danza llegó a la televisión.
Marla nunca había estado en Medio Oriente, sin embargo se documentaba de libros y había tomado clases en Estados Unidos por lo que aparte de compartir sus conocimientos aprendidos en dicho país, también contaba con videos Beta para complementar sus clases. Fue así como poco a poco se fue popularizando esta danza y para este año ya se impartían clases en el centro Libanés, aparte de haberse fundado un restaurante libanés en Polanco, Adonis, en donde se daban exhibiciones de danza árabe. Tanto fue el éxito de este restaurante que bailarinas reconocidas a nivel mundial de esta danza, se presentaban en este lugar y también esta danza llegó a la televisión.
Guillermo Ochoa tenía un
programa de radio en donde se presentaban diversos temas y muchas veces Celeste
Sáens, una gran bailarina de esta danza, fue invitada para mostrar esta danza a
todo México. Fue así como esta danza se dio a conocer en México y ha sido ligar
de residencia y de visita de grandes bailarinas, fomentando que esta danza sea
muy apreciada en nuestro país.
2011
Poco a poco esta danza ha adquirido popularidad y ha formado a bailarinas con un gran talento que siguen preparándose día a día no solo en México sino en academias reconocidas a nivel mundial. Para este año 2011 en México se reconocieron aproximadamente a 10 bailarinas mexicanas con un gran nivel y reconocimiento en esta danza.
Poco a poco esta danza ha adquirido popularidad y ha formado a bailarinas con un gran talento que siguen preparándose día a día no solo en México sino en academias reconocidas a nivel mundial. Para este año 2011 en México se reconocieron aproximadamente a 10 bailarinas mexicanas con un gran nivel y reconocimiento en esta danza.
La lista de precursoras de la danza árabe en nuestro
país incluye, además de Samira, a Nour Said, Laila Kannan y Akira Salwa, además
de Ylenia Escogido, Silvia Álvarez, Aman-Ra y Mirna Garibay Contreras.
Esta danza actualmente se encuentra entre las favoritas de las adolescentes mexicanas, quienes gracias a celebridades como Shakira y Selena Gómez se han sentido atraídas y motivadas para seguir esta danza, que más que una moda, es una actividad que disfrutan las jóvenes.